La Cuenca Minera,
hoy os quiero presentar otra Asturias; hemos tomado el sol en alguna de las playas más bonitas de la región, hecho juntos senderismo en la montaña, visitado museos y paseado por ciudades pero nos falta (entre otras muchas cosas) recorrer la Asturias Minera e industrial. Puede que sea la parte menos vistosa, la menos turística, pero sin duda es fundamental; ni la morfología ni la historia moderna de la región podrían entenderse sin la minería, que daría un vuelco radical a la forma de entender el trabajo y la sociedad del siglo XIX.
Hoy, los castilletes (en su mayor parte en desuso) forman parte del paisaje asturiano, sobre todo de las Cuencas, tanto del Nalón como la del Caudal. El fin de la minería está a la vuelta de la esquina por la escasa rentabilidad, o eso dicen, por lo que hay un afán por preservar los vestigios de esta industria. No solo existe MUMI (Museo de la Minería y de la Industria), sino que en las zonas mineras, como en el Valle de Turón, existe una 'Ruta' que conecta alguno de los pozos - en desuso- más relevantes del panorama minero asturiano. Así que mi propuesta de hoy es un paseo por el paisaje minero de la Cuenca del Caudal: desde Santa Bárbara al 'Pozu' Fortuna pasando por el Pozo de la Rabaldana y el de Espinos.
¿Os venís?
Dejamos el coche en Santa Bárbara, caracterizado por sus dos castilletes, uno de ellos en restauración. Después de dar una vuelta alrededor de las obras y echar un vistazo a uno de los edificios abandonadas continuamos nuestro recorrido por el paseo fluvial que une los diferentes pozos hasta llegar a la Rabaldana. Todavía hoy son visibles los restos de las vías para transportar el carbón en las vagonetas de un pozo a otro, como visible es también el riachuelo que forman los conductos de liberación de agua de la mina. Si el carbón es el material preciado, el agua se convierte, dentro de la mina, en un enemigo a canalizar.
Bien, seguimos y un poco más adelante nos encontramos con el 'Pozu' Espinos, el más característico de toda la región por su castillete de madera, desde cuya cima se puede ver el pozo Santa Bárbara. A continuación y sin salirse del camino nos encontramos una zona verde en la que se exponen algunas de las máquinas que se utilizan/utilizaban en el interior de las galerías para la extracción del mineral: desde rozadoras a vagonetas de tren.
Nuestro recorrido termina en el Pozo Fortuna, un homenaje a los caídos por la República, muchos de ellos asesinados y enterrados aquí en uno de los agujeros que quedaron de los trabajos suspendidos por el estallido de la guerra. La mina, aún sin explotar se convirtió en una de las fosas comunes más importantes de Asturias, donde se cree que hubo más de 300 cuerpos. La bandera tricolor, así como los versos de Cesare Pavese o Miguel Hernández y la escultura turonés José Luis Varela rinden homenaje, hoy, a los caídos por la Libertad. Actualmente, ya que nunca llegó a ser explotado, es un centro de Interpretación Minera, donde además de recogerse la historia del pozo, al final del recorrido se accede también a una estancia en la que se alude a la recuperación de la Memoria Histórica y a los hechos allí acontecidos. Así mismo se recorre una auténtica galería subterránea, destinada a polvorín, en la que se pueden experimentar las sensaciones del trabajo bajo tierra.La visita se completa con un recorrido por el exterior donde se pueden contemplar los paneles exteriores y diversos ejemplos de maquinaria minera.
Sobre la historia de la minería y lo que supuso su llegada a la región os hablaré más adelante, cuando nos toque hablar del MUMI, que por cierto merece mucho (mucho) la pena visitarlo. Al final de la galería fotográfica, os explico cómo llegar (¡bendito google maps!).
¡Espero que os guste!
Cómo llegar desde Mieres:
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