Día en el que las mentiras piadosas están permitidas, siempre y cuando terminen con un: ¡Inocente!
Se contesta al teléfono con suspicacia y todo aquello que qualquier otro día sería posible, hoy es considerado una broma.
Pero, ¿quién es más iluso que el estudiante que se pasa los días de vacaciones entre apuntes, bolis, subrayadores, libros y trabajos? Pues eso, va por nosotros: ¡Inocentes!